
Te contamos las diferencias entre autónomos y freelance, dos figuras muy parecidas sobre el papel, pero con algunas diferencias.
Los términos autónomo y freelance se suelen utilizar como sinónimos cuando hablamos de trabajo por cuenta propia. Pero lo cierto es que, desde un punto de vista estricto, existen diferencias entre un freelance y un autónomo.
Por lo tanto, si estás pensando en trabajar por cuenta propia prestando tus servicios a un tercero, te conviene conocer las diferencias entre ambas figuras.
El freelance es un trabajador que colabora con personas particulares, con empresas y otros trabajadores autónomos de forma puntual. Por norma general, los trabajadores freelance se ubican principalmente en sectores tecnológicos y de la información como diseñadores web, periodistas, programadores, consultores, redactores de contenido, fotógrafos, o community managers…. De hecho, lo que realmente caracteriza a un freelance es que realiza trabajos o colaboraciones esporádicas e intermitentes, ahí está la clave de este tipo de trabajador por cuenta propia.
Diferencias entre un freelance y un autónomo:
El freelance y el autónomo se parecen bastante, pero no son lo mismo en términos prácticos.
- El freelance no es una figura jurídica en España.
- El autónomo sí es una figura jurídica, porque es una forma de empresa para poder realizar una actividad económica.
- El freelance puede realizar trabajos para terceros de forma esporádica a cambio del pago de una cantidad de dinero concreta.
- Un autónomo puede realizar trabajos de forma continuada y cobra una cantidad variable de dinero.
Servicios
- El freelance presta sus servicios a terceros por cuenta propia y de forma esporádica.
- El autónomo presta sus servicios por cuenta propia pero de forma indeterminada y continuada. Un community manager ofrece su servicio a una empresa a lo largo del tiempo, es un claro ejemplo de autónomo.
Esperamos que te haya gustado este post ¡¡Feliz fin de semana!! 🙂